miércoles, 23 de noviembre de 2011

Solamente tú.

Creo que me estoy pasando con esto de dedicarte entradas. Pero no puedo evitarlo, eres lo único que me inspira para escribir. Me viene a la cabeza una imagen tuya sonriendo, y en ese momento no puedo dejar de pensar en cuánto te quiero. Entonces, me inspiro y escribo.
En fin... que sé que nunca soy capaz de decirte todo lo que pienso, y por eso lo escribo. Me encantaría poder decirte todo esto... y solo quiero que me prometas una cosa. Dime que nunca vas a cambiar, que nunca vas a dejar de ser tan perfecto a tu manera. Con que me digas eso, estaré satisfecha. Y lo único, lo único que no me apetece hacer en la vida es olvidarte. Nunca podria sacarte de mi cabeza, ni ganas que tengo, y tampoco me gustaría tener que intentarlo nunca. Es que, al estar contigo, es como si estuviera encima de una nube que viaja por todo el mundo, es como si miles de emociones me vinieran de repente solo por tenerte cerca.
Porque eres una de las cosas que más me importan en este mundo, y tu locura puede conmigo, tu mirada puede conmigo, tú entero puedes conmigo. Es como si al tenerte al lado quitaras de repente toda la tristeza de mi cara, no sabría explicarlo de otra manera. Solo pido que cada vez que mires al cielo y veas una estrella o una nube, recuerdes que te quiero más que a nada. Y sí, te tengo en un pedestal, pero te aseguro que jamás vas a bajar de él. Ni aunque me digas " jamás digas jamás " , yo te respondo con esto:
Jamás dejaré de quererte, jamás me cansaré de oír esos dulces " te quiero " que salen de tu boca, jamás dejaré de pensar en ti un segundo, jamás me olvidaré de ti. Hay muchos jamases, pero también hay muchos siempres. Siempre serás importante en mi vida, en mayor o menor cantidad, pero lo serás. Y de eso, estoy completamente segura. No quiero luchar por nadie que no seas tú.

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